Este año, la asociación americana Little Brothers – Friends of the Elderly, miembro de la Federación Internacional Petits Frères des Pauvres, tuvo que adaptarse para celebrar Thanksgiving.
Un poco de historia
Thanksgiving es una fiesta que se celebra en los Estados Unidos en agradecimiento por las buenas cosechas obtenidas por los primeros colonos en 1621. Estas buenas cosechas siguieron a un invierno duro donde los nativos americanos enseñaron a los inmigrantes a cultivar, pescar y cazar. Para celebrar las abundantes cosechas, los inmigrantes invitaron a los amerindios a un banquete y los amerindios trajeron pavos salvajes, un animal desconocido en Europa en ese momento.
El 3 de octubre de 1789, después de la Guerra de la Independencia en los Estados Unidos, George Washington hizo oficial el Thanksgiving. Fue Abraham Lincoln (en 1863) quien lo arregló el 4º jueves de noviembre.
Y hoy
Es una oportunidad para una buena comida familiar. El pavo está en el menú tradicional (más de 40 millones de pavos se comen ese día). De postre, el pastel de calabaza es imprescindible porque los primeros en llegar se hubieran salvados durante el invierno comiendo calabazas.
A los americanos les gusta mucho esta fiesta. Es una oportunidad para que las familias dispersas por todo el país se reúnan por unos días. Y como es el Día de Acción de Gracias, muchos americanos distribuyen comidas a los necesitados en esta época del año. Las organizaciones de beneficiencia son muy activas en ayudar a los necesitados en Acción de Gracias.
Este año, Thanksgiving se celebrará teniendo en cuenta las medidas de salud
En Boston, Cincinnati, Chicago, Houghton, Minneapolis, Nueva York y San Francisco, las asociaciones de Little Brothers – Friends of the Elderly se han adaptado para poder celebrar el Día de Acción de Gracias a pesar de las restricciones de la crisis de covid-19, porque las personas mayores aisladas se sienten aún más solas ese día.
En Chicago, cerca de 800 comidas serán entregadas en casa con la organización Gight2Feed: “¡Este va a ser nuestro más grande Thanksgiving! Este año no ha sido como cualquier otro. Pero con la ayuda de nuestra comunidad, nos centramos en acompañar las personas mayores de Chicago que envejecen solas, con nuestra amistad y apoyo. Aunque no podamos reunirnos en estas fiestas, las personas mayores de Chicago aún lo celebrarán con una rica comida casera. ¡También recibirán mensajes diciéndoles que las queremos y que vamos a seguir a cuidarlas, gracias a nuestros voluntarios! »
En el Alto Michigan, tenían 9 sitios en 5 condados donde preparaban y entregaban más de 1030 comidas. Cathy Kass-Aten, Directora, explica: “Trabajamos estrechamente con el Departamento de Salud e implementamos un plan de seguridad integral. Teníamos uno o dos controladores de seguridad en cada sitio que se encargaban de revisar a todos los voluntarios. A todos los voluntarios se les informó con antelación de nuestras pautas de seguridad y luego se les revisó en el lugar tomando su temperatura y haciéndoles preguntas específicas. Los conductores no salían de sus coches, les llevábamos comida una vez que pasaban el control. Cuatro sitios en realidad rechazaron a los conductores que no habían pasado el control, lo que es una buena señal de que nuestro plan fue seguido. Dimos kits de seguridad a todos los conductores. Todos los voluntarios en las cocinas llevaban una máscara y una visera sobre su máscara”.
“Todos los beneficiarios sabían que iban a recibir una comida entre las 12 y las 2 de la tarde y tenían que confirmar con el conductor que estaban allí y que podían recibir la comida. Los conductores tenían que llamar a la puerta e identificarse, dejar la comida e irse si el beneficiario abría la puerta. La participación de los conductores fue excelente y todos estuvieron de acuerdo con nuestros procedimientos de seguridad”.
Cathy Kass-Aten concluye: “¡Estoy muy orgullosa de nuestro personal y voluntarios! ¡La gente realmente quiere hacer algo bueno! La reacción de los voluntarios fue muy positiva y reconfortante. Ya nos estamos preparando para el día de Navidad”.
En la foto de abajo está el sitio de Hancock, voluntarios esperando para recibir la comida que se entregarán.
Crédito de la fotografía: Little Brothers Friends of the Elderly – Upper Michigan